Señoras y señores
Ana Mato no sabía nada. Llegaba el cumpleaños de sus hijos y, como cualquier madre, se afanaba por organizar la mejor fiesta posible junto a sus compañeritos de clases con globos, payasos, chucherías y tal vez emparedados de Nocilla. Cuando sacaba un hueco entre sus intervenciones en el Congreso, la exministra se encargaba seguramente de […]