Hola amigos humanos, mi nombre es Jhonson, tengo 5 meses y mi vida se desvanece por segundos…

Os contaré mi triste historia…

Mi destino fue escrito el mismo día que nací, un destino que me persigue como si yo fuera la mala suerte hecha perrito. Mi nacimiento no fue uno cualquiera, no tuve la misma suerte que otros de mi especie, nací en un descampado junto a mis 3 hermanitos, mi mami era callejera, fruto de un abandono anterior que los humanos produjeron.

Tras el parto sin saber porqué mi mama falleció, ni siquiera nos dio tiempo a sentir su calor, era como haber venido a un mundo de hielo. Nosotros estábamos solos, sin poder comer ni movernos. Empezó a bajarnos la temperatura hasta que de repente sentimos unas manos calentitas que nos abrazaban, era el tacto de un humano que nos llevó a su hogar, y nos empezó a alimentar con una cosa llamada biberón, estaba muy rico pero añorábamos a mamá. Días después deje de sentir el latido del corazón de mis hermanitos, se fueron con mamá y me dejaron solito, nunca comprenderé porqué.

Pasadas unas semanas mis patitas andaban y empecé a perseguir a todo bicho viviente, a los humanos les gustaba, así que yo lo seguí haciendo.

Cumplí los 2 meses, la edad perfecta para correr, jugar, alimentarme con comida durita… Pero algo cambió, las caras de los humanos no eran igual de alegres que siempre, y ahora comprendo el porqué…

Me metieron en una cajita y me llevaron a un sitio helador, donde había mas perritos como yo, pensé tampoco está tan mal este lugar, pero me equivoqué… Iban pasando los días y los humanos no regresaban, yo me sentía solo y apenado, rodeado de tanto perrito y de gente desconocida.

Mi pelo ya no era el mismo y mi comidita tampoco, cada día estaba mas sucio, solo me faltaba esperar a los humanos que pensaba que se habían ido de vacaciones…

Han pasado casi 3 meses, y ellos no regresaron, sigo estando solo y con mucho miedo.

Mi jaula ya no es la misma, estoy en la parte trasera donde nadie puede verme, mas que algún humano que trabaja allí.

No he oído nada, pero he recibido tantos palos en mi corta vida que sé que mi final esta cerca…

“Gracias humanos por darme la oportunidad de nacer, pero gracias a vosotros, mi destino es la muerte siendo cachorro”

Animales Rioja hace un llamamiento a toda persona gran amante de los animales que desee tener una mascota, a toda persona que sepa desvivirse por ellos sin pensar nunca en el abandono. Este cachorrito es uno de los 50 peludos que sacrificarán el 20 de agosto, no permitamos que esto suceda. Adóptale o acógelo temporalmente, él no tiene la culpa de haber nacido.

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TATI Y JHONSON YA NO SERAN SACRIFICADOS

El equipo de Animales Rioja, quiere daros las gracias a todos.

Por la difusión, el ánimo, y las fuerzas que nos habeis mandado, para poder conseguir que estos pequeñajos no serian sacrificados, sin vosotros esto no hubiera sido posible.

Ha sido increible ver como cientos de personas conocidas y desconocidas nos alzaban su mano para ayudar a estos peludines.

“DE CORAZÓN, GRACIAS”