La sensación de que un perro pequeño no tiene grandes necesidades de ejercicio, no siempre es acertada. Hay razas, como los terriers, especialmente enérgicos, que requieren de grandes dosis de actividad física para desarrollarse de forma equilibrada.
En cambio, otras razas más grandes y aparentemente menos adecuadas para el hogar, tras un paseo y algo de actividad moderada, se mueren por pasar el resto del día, en el metro cuadrado que rodea a tus pies.
Al igual que las personas, cada individuo es único, y es por ello, que no es recomendable dejarse llevar únicamente por lo que nos cuentan los libros, aunque si es preciso informarse sobre las necesidades específicas del tipo de animal que tienes delante, así como el carácter que tiene ese peludo en concreto, para tener una idea de lo que debes proporcionarle si entra a formar parte de tu familia.
Tristán tiene tres años y es uno de esos gigantes peluche que asusta por tamaño y enamora por carácter. Es el encargado de recibir a los nuevos y “enseñarles” las rutinas de la guardería. Paciente y cariñoso, solo busca mimos y atención.
Contacto: dan.asociacion@gmail.com