La madre enseña a los gatitos a ser limpios desde el nacimiento, lamiéndolos activamente después de mamar, estimulando el reflejo de micción y defecación y enseñando progresivamente el lugar adecuado para hacerlo.
Cuando un gatito es adoptado a la edad de dos meses o más, ya ha aprendido de la madre las pautas de higiene básicas. Es decir, sabe buscar un lugar conveniente para eliminar lejos de las zonas de alimentación, juego o descanso. Es importante respetar este periodo para que los gatitos adquieran este importante hábito, que conservará toda su vida.
Menta y su hermano Limon fueron rescatados de un descampado… no habrían aguantado ni una noche mas sin su madre…
Menta, es activa y juguetona. Limón es más tranquilo y ambos, son muy cariñosos y se llevan genial con otros gatos.
Negativos en Fiv y Felv
Contacto: dan.asociacion@gmail.com