Con el buen tiempo llegan los insectos y, con ellos, las picaduras. En la mayoría de los casos, son más molestas que peligrosas pero hay animales que, al igual que ocurre con algunas personas, presentan sensibilidad y alergia.
En una reacción de hipersensibilidad se produce una activación masiva de mediadores inflamatorios y se libera histamina. Toda esta cadena puede provocar desórdenes respiratorios, colapso cardiovascular y, en los casos más graves, la muerte.
Si la respuesta inflamatoria es exagerada, no encontramos el aguijón o está alojado en ojos, nariz o boca, es preciso acudir al veterinario para que corte la inflamación y valore el estado general del animal.
De los tres hermanitos recogidos este fin de semana por nuestra amiga Emma Del Valle Río de Mascotas Clínica Veterinaria, quedan por encontrar hogar las dos hembritas (el macho ya está con su nueva familia). De mayores serán medianas, en torno a los 15 kilos de peso. Urge encontrarles buenas casas y se agradece toda la difusión posible.