Una buena convivencia entre personas y gatos, siempre está marcada por la buena relación con el animal.
El gato nos enseña a descifrar su lenguaje corporal o sus maullidos, en función de sus propias necesidades, para que nosotros podamos atenderlas lo antes posible. Si aún no habías reparado en ello, te invitamos a observar a tu gato y tratar de identificar a lo largo de un día, las diferentes maneras de reclamar nuestra atención ya sea cuando tiene hambre, se siente incómodo o simplemente requiere de nuestra presencia tal como lo hacía con su madre cuando era pequeño….