Los autores norteamericanos popularizaron el acrónimo ABC para referirse a las contingencias, porque esas son las iniciales en inglés de los tres elementos de la contingencia: Antecedent, Behavior, Consequence.
Para explicar porqué tu perro se comporta de la manera en que lo hace, lo primero que debes conocer son los tres conceptos básicos de la modificación de conductas: antecedentes, conducta y consecuencias.
Los antecedentes son aquellas cosas que ocurren o están presentes antes que se produzca la conducta, y pueden ser cualquier cosa. Se pueden considerar, el desencadenante de la conducta (aunque técnicamente no lo son).
La conducta es aquello que tu perro realiza. Puede ser cualquier acción, la veas o no. Por ejemplo, tu perro puede mostrarse muy atento (una conducta que puedes ver) cuando levantas su plato para ponerle comida, pero también puede empezar a salivar y secretar jugos gástricos (conductas que no ves). La definición de conducta es compleja y existen diferencias sobre esta definición entre quienes estudian el comportamiento (psicólogos, etólogos, etc.). Sin embargo, para fines prácticos, basta con decir que la conducta es cualquier cosa que hace tu perro.
Las consecuencias son las cosas que ocurren después de la conducta. De este modo, la conducta puede ser modificada por sus consecuencias. Las tres maneras de modificar la conducta a través de sus consecuencias consisten en:
El protagonista del post es este peque color canela, jovencito y menudo que, este pasado fin de semana, ha aparecido en un finca sin chip ni otra identificación. La familia que lo ha recogido no lo puede tener por más tiempo. Si lo reconoces o quieres ayudarle acogiéndole o adoptando, contacta con la Asociación Protectora de Animales de La Rioja en el 679.06.46.46