Sasha Tioumentsev no puede esconder sus sentimientos. Y menos si está contento, cuando es feliz jugando al balonmano. Hace un rato, Sasha no podía dejar de sonreír, mientras practicaba una y otra vez las jugadas que Jota González tiene en la cabeza y en sus cuadernos. Es que el primera línea ruso, después de un mes de baja, tiene el alta médica para volver a jugar, algo que Jota y el equipo agradece debido a la merma de jugadores por lesiones.
Pero no es el único que vuelve a tocar el parqué del Palacio de los Deportes. En el entrenamiento de esta tarde volvieron a jugar Pedro Rodríguez y Capote, ambos tocados con problemas musculares. Así que la enfermería se va desagotando para felicidad del entrenador y de una plantilla que ha sabido colocarse en la tercera plaza con medio equipo en el dique seco. Admirable, sin duda.Como premio a ese trabajo, los jugadores gozarán del fin de semana libre, muy merecido, por cierto, a mi juicio. Todavía queda lejos el próximo enfrentamiento ante el Villa de Aranda, el sábado 10 de noviembre, a las 20.00 horas en el Palacio de los Deportes. Mientras tanto, esperemos ver otra sonrisa, la de Gurutz, quizás, aunque todavía es pronto para saber.