Permitame que insista. No es normal lo de este Naturhouse, que esta noche venció en el Palacio de los Deportes 32-27 a todo un Ademar. Acumula así once jornadas ligueras invicto, 18 partidos, unidos a los de Champions, en los que solo ha cedido tres puntos (la derrota ante el Chekhovskie en Riusia y el empate en Cuenca ante un buen Ciudad Encantada). Todo lo demás han sido victorias. Y algunas de calidad, como la de esta noche. Tremendo Naturhouse el que vimos (hoy me tocó ser aficionado, y pululé por todo el pabellón -en unos días veréis la razón-), más ganador que nunca, con la moral por los cielos para enfrentar en una final al Oporto portugués el sábado.

Malmagro, la estrella del partido, anota uno de sus goles. Foto: Martín Schmitt

Del partido de hoy destaco la tarea de absolutamente todos los jugadores franjivino. Cristian Malmagro fue imparable, con sus once goles de calidad. Rubén Garabaya fue un león en una defensa bien comandada ante unos atacantes muy incómodos, como el brasileño Acacio. Cabe destacar ewl papel más oscuro que realiza Miguel Sánchez-Migallón en esa brava retaguardia. Víctor Vigo demostró tener un pulso tremendo para manejar las riendas del equipo. Ángel Fernández, tremendo en ataque y en defensa; Pedro Rodríguez, certero y movedizo con sus desdoblamientos; Stenmalm y Molina, unas fieras desde los nueve metros; Javi García, un monstruo luchando con Carou en la línea de seis metros; Kappelin, otra vez con el candado en la mano para cerrar la portería.

Pero hoy quiero destacar, por encima de los demás, a Jota González, que nunca se lleva ningún tipo de crédito cuando se gana y se lleva todos los palos cuando el equipo pierde. El vallisoletano diagramó un esquema perfecto en los momentos adecuados. No conozco un entrenados en Asobal que pueda sacar el rendimiento de una plantilla como la que tiene el CB Ciudad de Logroño. Y encima con movidas tácticas preciosas. Hoy gocé como un hincha. Y por eso le quiero agradecer a Jota el partido que planteó ante un equipazo como el leonés.

No sé si fue mi impresión por no estar en mi habitual sitio de trabajo, pero el Palacio se lo pasó muy bien con el juego de los franjivino, que ahora estiran la diferencia con el tercero, un Granollers que ganó con suspense al Villa de Aranda 32-30, en cuatro puntos. Os pongo algunas fotos de los aficionados que gozaron esta noche de un nuevo triunfo franjivino. Próxima parada, Oporto.

Desde Lardero para el mundo. Laura y Carlota se divierten con el Natuhouse. Foto: M. S.

Aunque lesionados, no pierden la sonrisa Pablo Cacheda y Albert Rocas. Foto: M. S.