No hay día que no nos sorprenda con otro capítulo del ‘caso Kiel‘ y las cada vez más fundadas sospechas de que los alemanes utilizaban algo más que el balón para ganar los partidos.

Y lo más alucinante: uno de los árbitros ucranianos bajo sospecha resulta tener un escandaloso pluriempleo: además de árbitro ¡es representante de jugadores! Y peor: la EHF lo sabía y, de nuevo, NO HIZO NADA. Bufff.

Y yo, en La Rioja, recordaba que nosotros también jugamos en Europa. Lo podéis leer en larioja.com

Árbitros, el lío que no cesa Por qué queremos Europa