Los niños crecen y se marchan de casa. Es Ley de vida. Dani Tolmos, esa joven joya de Tarazona que debutó en Asobal con tan solo 18 años de edad con la camiseta del Naturhouse (ante Antequera y marcando un gol) ha madurado al amparo de Jota González y Álvaro Senovilla y necesita jugar. Y con centrales como Víctor Vigo y Pablo Cacheda por delante en el conjunto franjivino no tendrá el lugar que pretende este joven primera línea con mucha proyección. Por eso el aragonés ha decidido marcharse al Ciudad Encantada la próxima temporada. Una apuesta valiente para alguien que ya se siente preparado para tener más minutos en Liga.
No era la única oferta que tenía el 22 sobre la mesa. Eran varios los equipos que se rifaban al joven canterano y fue Cuenca el que hizo la oferta más seria. Dani es sinónimo de esfuerzo, de trabajo, siempre dando una mano al primer equipo en los entrenamientos, en desplazamientos y en partidos, y uno de los ejes del filial en Segunda División. Por eso, y porque soy amigo suyo y de su familia, le deseo lo mejor en el futuro. Un prometedor futuro, porque este chico tiene talento, y mucho. Dueño de un poderoso lanzamiento, Dani es un jugador muy técnico, capaz de defender en el lateral o en el extremo, que en un equipo como Cuenca puede funcionar muy bien.
Como ya anunciara Jota González el lunes pasado, el CB Ciudad de Logroño no exigirá el pago de derechos de formación por Dani Tolmos. Espero que este gesto suavice la relación con el conjunto conquense.