El Ciudad de Logroño ya ocupa la segunda plaza de esta Liga Asobal tan igualada. Le acompaña un Huesca que venció en Pamplona y que luchará en la zona alta. Pero ahí está el bloque franjivino después de aplastar a un Alcobendas que venía de ganar al Guadalajara, que hoy empató con el Cuenca, próximo rival de los hombres de Velasco. Un nuevo triunfo (41-26) coral, ya que todos los jugadores, salvo Vanja Ilic que jugó muy poco por su lesión en la mano derecha, marcaron algún gol.
El equipo jugó francamente muy bien. No hay que olvidar que se trata del segundo conjunto más joven de la Asobal. Edu Cadarso fue una de las figuras, porque fue uno de los responsables de abrir el melón del partido bajo su batuta. Y el riojano respondió con conducción y goles. Kule Kusan brilló en defensa. Miguel Ángel Velasco le dejó la responsabilidad de comandar la retaguardia y respondió con creces. Junior Scott por fin mostró su calidad: finta, armado rápido y latigazo. El francés se fue del Palacio con siete goles. También Balint Fekete mostró su calidad, tanto en defensa como en ataque. Tomás Moreira fue uno de los jugadores que más me gustó. Se fajó con la defensa madrileña y casi siempre ganó la batalla. Importantísimo en los seis metros. Y no me quiero olvidar de Gurutz Aginagalde, que hasta esta jornada no había gozado de minutos de calidad. El capitán respondió con una efectividad del 35 por ciento con sus once intervenciones.
Pero al margen de las individualidades, fue la orquesta franjivina la que sonó bien alto. Un triunfo que debe servir para coger más moral para el último choque antes del parón ante el Ciudad Encantada en Cuenca. Un escenario que no se le da nada bien a los riojanos. Pero este equipo tiene desparpajo y no le tiene miedo a nada.
Por otro lado, el Sporting volvió esta tarde a la senda del triunfo tras caer la semana pasada contra el Beti Onak. Las de Juanjo Lalinde, que tuvo que ver el partido desde la grada, vencieron al Lagunak por 34-24 y regresaron a ocupar la segunda plaza, por debajo de un Lanzarote que parece intratable de momento.