Asamblea de un club deportivo. Tema: precio de los abonos para el año que viene. Propuesta: congelarlos, o sea, todo igual. Resultado: propuesta rechazada: la asamblea quiere… pagar más.
¿Ciencia ficción? No: Valladolid. La afición pucelana da motivos de pasmo casi cada día. La última, ayer, fue decidir en la asamblea que querían pagar sus abonos más caros el año próximo. Fue el socio número 605 de la entidad, don Javier Manzano, quien tumbó la propuesta de la directiva, y sacó adelante la suya: subir los abonos entre el 4 y el 5%.
Los abonos del Naturhouse llevan 2 años congelados. ¿Subirán?
No está mal que una afición lleve su compromiso con el equipo a este nivel. Tampoco es que un 5% de subida vaya a arruinar a nadie, y el balonmano no es algo tan caro. En Logroño, por ejemplo, los abonos llevan dos años costando lo mismo. La directiva está retrasando la campaña de abonados de este año, y quizá sea que se encuentran en ese dilema: ¿subimos o no subimos?
Aunque más bien me da en la nariz (porque no he hablado de este tema con nadie del club) que la pregunta es “¿cuánto subimos?”. También es posible que esté dando vueltas en el ambiente el asunto del posible abono conjunto con la UD Logroñés de Segunda B. Que viendo cómo están de enconados los ánimos, no se yo…
En fin. ¿Aceptaría la afición logroñesa una subida en el abono para ver al Naturhouse el año que viene?