Creo que mi cuerpo no me soporta más. Al menos, por hoy. No puedo quejarme: le he pedido un poco más de lo que debería, y el pobre ser revela. Pero que se fastidie: al fin y al cabo, cosas como ésta no se viven todos los días.
La tarde me ha dejado, además de mucho cansancio y un cierto malestar general, un buen montón de cosas interesantes. Por ejemplo, que no nos dejan ni a sol ni a sombra. Del aerpuerto al hotel, escoltados por la poli. Del hotel al pabellón (200 metros) con un policía armado. En el pabellón, dos polis en la grada y otros cuantos fuera. Y a los que (no jugadores claro) se han ido a echar una copa esta noche les ha llevado la poli a un sitio especial
No me queda claro si es que quieren protegernos o es que no se fían de nosotros. Es broma: nos están tratando fenomenal estos serbios. Ya sólo faltan que mañana les ganemos…
Eso sí que es broma. Habra que pelear cada centímetro en este micropabellón que es Sumice. Caben 1.200, y la bandas están más cerca de la grada de lo que he visto en España. Y este Estrella Roja tiene muy buena pinta.
Y es un equipo que quiere crecer. Esta tarde he tenido el placer de hablar un rato con Nenad Perunicic, uno de los grandes de la historia de este deporte, que ahora es el manager general de este club que quiere volver a hacer honor a su gran nombre. Para ellos, me decía, este partido no es uno más.
Que me voy a la cama a desmayarme un rato. Una buena noticia: he estado en el pabellón haciendo prueba, y aparentemente no tendré demasiados problemas para narrar el partido en directo. Tengo muchas ganas. Ya sabéis:a partir de las 18.30.
PERDÓN: El partido es a las 18.00, como bien me habéis corregido. El que es a las 18.30 es el de vuelta.