Pongámosle banda sonora a la historia, aunque no para que sea menos seria.
No sé si te llamas Simón, pero sí sé que eres tonto. La poli te pilló el otro día, mastuerzo, con tu BMW. Te acabas de sacar el carné, así que no podías pasar de 80. Pero ibas a 185. Qué guay.
Tienes 23 años, así que es de esperar que, con el tiempo, puedas ser un poco menos calimero. Quizá con la multa que te van a poner aprendas que la velocidad mata, que no hay nada tan estúpido como jugarse el cuello y la cartera por correr más.
Es cierto que no eres el único bobo; a otros les da por mamarse como niños de teta al coger el volante. Algunos de récord, como el sevillano que pillaron en navidades con 1,73. La poli no entendía cómo se tenía en pie.
Eso: eres tonto. Háztelo mirar, y pronto. Porque no me quiero cruzar contigo por la carretera.