QUIERO SER ZAMORANO | Chucherías y quincalla - Blogs larioja.com >

Blogs

Teri Sáenz

Chucherías y quincalla

QUIERO SER ZAMORANO

Siempre había preconcebido Zamora como el icono del provincianismo. La antítesis de cualquier urbe mediana, el reverso de la modernidad. Imaginaba que vivir allí tendría que parecerse a crecer en Palencia. Algo tan vulgar como pertenecer a un lugar lejano y difícil de ubicar en el mapa como Cuenca, Ciudad Real, Soria o Albacete. Sufrir toda la vida que el resto del mundo rime tu ciudad con ‘coño’.

Pues va a ser que no. Pasear por sus calles es reconciliarse con lo minúsculo, comprobar que preservar el patrimonio puede ser algo natural para lo que basta un poco de sentido común realzando cada monumento, creando una minúscula plaza alredor de cada iglesia románica. Ahí se comprueba que revitalizar unas murallas no tiene por qué ser reconstruirlas en falso como un mueble de Ikea que nunca encaja, sino trazar un recorrido que recree la historia de sus piedras. Y allí, donde también existen otras tierras con nombre de vino, te incitan a visitar calados para degustar (¡gratis!) vino de Toro y motivarte a comprar unas botellitas aunque Parker las puntúe sin énfasis.

Es mentira. No quiero ser zamorano. Me conformaría con que el pequeño lugar donde habito esté reluciente, deje de enseñar las costuras de sus solares y el Casco Antiguo no sólo invite a beber sino también a vivir. Y si es posible, que también huela a ese aroma que deprenden los tilos en Zamora.


junio 2010
MTWTFSS
 123456
78910111213
14151617181920
21222324252627
282930