Pedro Sanz ha tenido hasta ahora una apariencia de humano. En el mitin celebrado anoche en Autol anunció que va a mutarse en un insecto. Concretamente en una mosca. Del tipo cojonera, para ser exacto. En un salón abarrotado y prolongando el acto con los agradecimientos de rigor por el cambio favorecido en el ayuntamiento del municipio, el presidente regional aseguró que la virtual llegada de Rajoy a La Moncloa no se traducirá en un pasteleo entre administraciones del mismo color. “Me va a tener en la puerta continuamente reivindicando lo que es de La Rioja”, dijo para vaticinar su metamorfosis: “Voy a ser una mosca cojonera”.
Son los arrebatos propios de una campaña sin la tensión de anteriores convocatorias, donde los líderes populares buscan imprimir en sus palabras un plus de complicidad. Un liderazgo del que, según Sanz, anda sobrado Rajoy. “El será el presidente que nos defienda de los vascos”, argumentó “con todo el cariño” para evitar así las discriminaciones sufridas en los últimos años en materia de infraestructuras o defensa del vino.
El acto incluyó como novedad la presencia de un cuarto espada. Además de la alcaldesa de la localidad, el candidato de turno (Alberto Bretón en esta ocasión) y el máximo mandatario del partido, se ‘coló’ en el cartel Carlos Cuevas en calidad de catón más que de secretario general o coordinador de campaña. Sanz le dio el visto bueno porque “aquí, Carlos, mandas tú”. No especificó si en el salón de banquetes donde se celebraba el mitin, en Autol o en el futuro del partido.
Fotografía: Asistentes al mitin celebrado el miércoles por la noche en Autol