Al agrio retrogusto entre buena parte de la militancia socialista de que son siempre los miembros de la misma familia quienes intercambian las sillas puestas en la mesa del poder y maquillan el mensaje del cambio tras cada derrota electoral, se une otra pastosa sensación de boca: la toma de decisiones no sale de la ‘corte’ de Logroño donde, a lo sumo, la mayoría deja de vez en cuando una puesto libre a los invitados de alguna agrupación influyente.
Así como Luis Alonso aglutina la llamada de atención al corporativismo entre la clásica cúpula del PSOE, Félix Caperos acaba de sumar un toque de atención a ese ‘logroñocentrismo’. Aturdidos por la creencia de que el número de afiliados de la capital riojana representa a todo el partido, muchos olvidan (olvidamos) el protagonismo de las bases en el resto de la comunidad. No sólo es posible un cambio, sino que también es factible impulsarlo desde fuera de Logroño. O entras palabras: menos moqueta y más tierra firme, menos mirar a componendas nacionales y más al día a día de la genet de aquí. Así se resume el paso al frente dado por el alcalde de Casalarreina, quien después de dejarse ver con unas rotundas declaraciones alentando a un giro de 180 grados propiciado por otros que no sean los de siempre, ha liderado la lista alternativa a la de la Ejecutiva en el ‘congresillo’ celebrado a la UR.
Todo hace indicar que esa irrupción es sólo el prólogo de su virtual candidatura al congreso regional que decidirá a finales de febrero al sucesor de Aldama. Lo que no está tan claro es cómo se gestionará el alineamiento con el ala crítica. Si encabezará una lista propia o sumará esfuerzos con la que se desmarca de Luena y Lacalzada.
Caperos cuenta a su favor de lo que Alonso carece. O al menos, lo que le ha achacado el aparato cuando decidió postularse como alternativa. El alcalde de Casalarreina posee experiencia de gestión y el valor más preciado ahora mismo en un PSOE en descomposición: la Alcaldía de una localidad que ha escapado del ciclón popular al que otros han achacado su desalojo de no pocos consistorios. Así como a nivel nacional y en ausencia de barones autonómicos son alcaldes como los de Soria, Toledo o Vigo los que reclaman su voz a nivel nacional, Caperos exhibe aquí unas credenciales que sólo Angel Fernández puede equiparar desde Aldeanueva. A ello suma también su presencia en el Parlamento riojano en un momento donde el acta de diputado será clave para reorganizar los diferentes frentes del partido. Y, como guinda, un expediente limpio de hipotecas con la actual Ejecutiva.
Todo eso y mucho más será lo que el partido, y el propio Caperos, deberán valorar de aquí a finales de febrero.
Fotografía: Juan Marín