Carlos Floriano (Cáceres, 1967) recaló ayer en Logroño con una áspera papeleta: razonar el mayor recorte de la democracia anunciado un día antes por Mariano Rajoy en el Congreso. El vicesecretario general de Organición del PP y número ‘3’ del partido asegura que el Gobierno “está determinado” a superar la crisis con ajustes “que no nos gustan pero son necesarios”.
-Todo el PP se hartó de censurar al PSOE por subir el IVA. ¿Dónde queda ahora su credibilidad?
-Siempre dijimos que la situación era muy mala y que ello nos exigía hacer cosas que no nos gustan nada. Y no las hacemos por placer ni ideología, sino porque el déficit se está desangrando a chorros y hay que cortar la hemorragia. La manera de hacerlo en este momento es, en entre otras medidas, subiendo el IVA.
-Rajoy ya sabía en campaña de las dificultades y, aún así, se reafirmó en contra de la medida.
-Hace sólo 15 días, los auditores independientes dieron a conocer cuál es la auténtica situación del sistema financiero, el 30% del cual está en mala situación. Hasta hace mes y medio no sabíamos que la magnitud del déficit era del 8,9%. Quiero decir con ello que no hemos sabido hasta hace bien poco cuál era el escenario en el que nos íbamos a financiar como consecuencia de estas cuestiones. Eso nos ha generado dificultades que, una vez conocidas, ha permitido tomar las medidas oportunas.
-¿Zapatero tenía razón y el sesgo internacional de la crisis deja a España sin margen de maniobra?
-El problema de Zapatero es que el día antes de anunciar los recortes decía que no había crisis. Nosotros, desde el principio, nunca hemos ocultado la gravedad de una situación que, al ir en aumento, nos obliga a tomar decisiones difíciles. Lo más importante es que tenemos un Gobierno determinado a sacar a los españoles de la crisis. No está pensando en la próxima campaña electoral, sino en el futuro de nuestros hijos, del interés general del país.
-Sueldo de los funcionarios, pensiones, prestaciones sociales… La gran parte de los recortes están recayendo en las clases medias.
-La clase media es la mayoría de la población y, por tanto, los que tenemos que contribuir en mayor medida. Le recuerdo que el gobierno del PP, y esa es parte de nuestro aval, ha sido el primero en limitar el sueldo de los directivos en las empresas con dinero público, en incidir en los tramos más altos al modificar el IRPF, en no tocar el IVA de los productos de primera necesidad, en articular mecanismos para frenar los procesos de desahucio o aplicar un copago farmacéutico en función de la renta y no de la edad buscando siempre la progresividad.
-¿Es esta gruesa batería de recortes la definitiva?
-Las reformas no pueden parar. España tiene que seguir modernizándose y adaptándose a las nuevas circunstancias. Un país que piensa que está todo hecho no tiene futuro.
-A pesar de todo no parece haber ningún asomo de recuperación.
-Le garantizo que de ésta, salimos. Primero, porque como le digo hay un gobierno dispuesto a hacer lo que hay que hacer para crear las condiciones para salir de la crisis. Y segundo, porque tenemos mucha confianza en la sociedad. Cuando los españoles se han sentido bien gobernados y se han creado las condiciones para generar empleo y riqueza, así se ha hecho. Y sí hay algún buen dato, como el aumento de la afiliación a la Seguridad Social en los últimos tres meses o el aumento del número de autónomos a pesar de la recesión.
-¿Se puede “estirar” más la cuerda sin que “estalle” el ciudadano?
-Tengo la impresión de que a una inmensa mayoría de la sociedad no le gusta, como a nosotros, pero entiende que hay que hacer esto. Es más: hay hoy una sensación de que “se están haciendo las cosas que deben hacerse”. Muchas movilizaciones que se están produciendo son consecuencia de una insolidaridad absoluta con el resto de los españoles. En este sentido fue significativo ver en el Congreso cómo algunos protestaban más por la reducción de liberados que subir el IVA.
-¿Y las miles de personas arrastradas por la mala gestión de entidades como Bankia que ahora se rescatan millonariamente?
-Una vez articuladas las soluciones para el sistema financiero, hemos pedido la comparecencia de 24 personas para dirimir todas las responsabilidades. Nosotros somos los primeros interesados en saber qué ha pasado y dar soluciones a esos ciudadanos “pillados” por algún banco.
Fotografía: Miguel Herreros