Además de las revistas y suplementos dominicales, las páginas extra de economía, algún folleto promocional, la siguiente pieza de una colección o quizás el cupón que le resta para adquirir esa pieza que no puede faltar en su hogar, Diario LA RIOJA le ofrece hoy por el mismo precio un regalo más a través de estas líneas.
Se trata de una lista. Un catálogo de advertencias básicas ante las elecciones que se avecinan. Un prontuario del que podrá echar mano para que los mensajes de unos y otros no le ahoguen o cuando, una vez llegado el momento, dude por quien decantarse.
1. ‘La culpa es del otro’. Un clásico entre los clásicos del debate político. Igual de recurrente en una reunión de vecinos que en el pleno de la ONU, culpar al rival de los males propios y ajenos ejerce de muletilla cuando las palabras propias se agotan (PD: combina a la perfección con el ‘Y tú más’).
2. ‘Prometo que…’ Las elecciones tienen forma de interruptor. Cada vez que llegan encienden los compromisos y la persona abandona su condición humana para trasmutarse en estadística, colectivo o contribuyente. ¿Que no cuadran las cifras? Bueno, y qué: el titular nos ha quedado precioso.
3. ‘Mejor a mí que al otro’. La ansiada búsqueda del centro tiene poco que ver con la flexibilización de principios. Es un eufemismo para llenar el morral de todos los votos posibles. Así que, si el mensaje no convence, que al menos el del contrincante convenza menos.
4. ‘Debate sí, debate no’. En vez de hablar y responderse a través de los medios de comunicación, lo lógico sería que los candidatos se dijeran lo que tengan que decirse cara a cara. Todos están de acuerdo en la bondad del debate, pero las diferencias sobre el quién, cuándo, dónde y cómo se debate acaba haciendo que el único debate sea decidir la forma del debate.
Aquí tiene la lista. Es gratis. Tírela o reléala cuando los políticos le acorralen. Úsela para adoptar una decisión. La mía está tomada. Votaré a Obama.