El guitarrista italo-americano Pat Martino nació en Filadelfia en 1944. Su padre, cantante y gran coleccionista de discos de jazz, le inculcó desde muy niño el amor por la música y pronto comenzaría a estudiar solfeo y guitarra. A los 15 años ya actuaba profesionalmente en el seno de algunos grupos de su localidad. Durante los 60 y los 70 se convirtió en una figura prestigiosa dentro del panorama jazzístico tocando al lado de Jack McDuff o Jimmy Smith así como mostrando su enorme virtuosismo en grabaciones a su propio nombre.
En 1980 ocurrió un hecho que partió en dos su biografía. Martino sufrió un grave aneurisma cerebral y tuvo que ser operado a vida o muerte. Cuando despertó en la cama del hospital y abrió los ojos un hombre y una mujer estaban en la habitación dispuestos a procurarle todo tipo de cuidados. Eran sus padres, pero no los reconoció. A Pat Martino le quedó una amnesia total.
Martino, con 36 años, era una persona nueva, limpia, vacía. Tuvo que reconstruir por completo su propia vida, tuvo que aprender todo otra vez, incluido tocar la guitarra. Lo consiguió con mucha paciencia, mucho esfuerzo y la ayuda de sus amigos músicos, estudiando los manuales de guitarra que él mismo había publicado y escuchando hasta la saciedad sus propios discos, tratando así no sólo de aprender a tocar de nuevo sino de recobrar su propio estilo.
Pasó de ese modo siete largos años, hasta que volvió a la escena musical en 1987 con el lanzamiento del disco The Return (El Regreso), que sorprendió muy gratamente a todo el mundo. El viejo/nuevo Pat Martino es hoy una leyenda de la guitarra, hombre respetado por la crítica, un referente para las nuevas generaciones de músicos y un colega admirado y querido dentro del mundo del jazz.
Martino, con 66 años, sigue disfrutando de su ‘segunda vida’ y nosotros, los aficionados, también. Escuchémosle en un concierto en directo en el 2008, junto a Tony Mónaco (un gran organista al que pudimos ver en el Ciclo de Jazz de Logroño hace dos años) y al batería Harvey Manson. El tema que interpretan es Sunny, un clásico del soul.
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