Aroma a madera. Tras su cristalera, esta tienda recuerda a un loft de aquellos que se soñaron y se hicieron realidad en Nueva York. Un local urbano, industrial, en el que levantar la mirada hacia el techo es ver los tubos al aire, hormigón y, a la vez, tener la sensación de estar en un espacio cómodo, cuidado y acogedor, a pesar de que éste último adjetivo parezca un imposible teniendo en cuenta que hablamos de 600 metros de planta.
Entre tanto espacio, estuve más de una hora entre sus maniquís, paseando, observando los detalles que acompañan a su ropa: cajas entre los jerseys, alguna maceta e incluso una antigua máquina de escribir Olivetti que, como no podía ser de otra manera, me conquistó tan sólo al intuirla de reojo. Así vi Okeysi.
Poco sabemos de esta firma en Logroño. Está en plena expansión en el mercado español, es una marca madrileña, que tiene al mando al empresario chino Xiaohua Chen. Su central está en la calle Bravo Murillo, una vía repleta de comercios a la que siempre se ha podido acudir para encontrar cualquier cosa, de todo, así lo comprobé en mi vida de estudiante en Madrid. Okeysi tiene unos 22 puntos de venta por todo el país (Madrid, Galicia, Andalucía, Comunidad Valenciana y Castilla y León). En sus planes también han entrado ahora Oviedo y la cercana Zaragoza.
Volviendo a Logroño, aquí ha sido la última en llegar al Centro Comercial Berceo, donde desembarcó el 12 de febrero. Unos días después, decidí ir a conocer qué es lo que podemos encontrar en Okeysi. Me moví entre sus mostradores, descolgué perchas, leí etiquetas, composiciones, tallas…recorrí desde la entrada de la tienda -que esta casa llama pasarela- hasta el final. Observé sus ‘burros’ en forma de grifería y ya con el entorno hecho mío hablé con Tamara Jurado y Ana Fuentes. Ellas son las encargadas de esta tienda en Logroño, las dos riojanas, junto a cuatro compañeras más, también de la región.
Me explicaron que, a diferencia de otras cadenas, en ésta no se vende la decoración, que el interiorismo de este local es producto del trabajo de un equipo creativo que idea el aspecto de cada uno de los puntos de venta, que siempre son diferentes. Esto último me agradó, cada uno con su personalidad, una sorpresa para cada ciudad.
El estilo industrial para Logroño es nuevo y exclusivo. “Todas las tiendas de la marca tienen una imagen característica y, además, se les puede dar la vuelta completamente en cualquier momento por cómo están montadas”, me indican señalando como ejemplo un sistema de paneles y haciendo referencia a la llegada de nuevas colecciones.
El etiquetado y las tallas
Tan importante es el continente como el contenido. Este grupo se dirige a mujeres entre 18 y 35 años, con tallas de la 36 a la 42 o las XS a XL, y en calzado (botines, manoletinas…), del 35 al 41, “en algunos modelos”, me puntualizaron.
En su etiquetado se indica si la prenda ha sido diseñada en España y fabricada aquí, o incluso diseñada en el país y confeccionada fuera. España, Italia y China son sus fabricantes.
En sus estanterías quedan prendas rebajadas: chaquetas, jerséis, camisas, faldas, pantalones, leggins, algún abrigo de manchas, lisos… y, por supuesto, la primavera ya viste sus maniquís. Colores suaves, rosas, azules…grises, blancos, estampados, flores, tribales, geométricos, telas ligeras, monos largos, con caída, bolsos de fiesta, brillantes, mochilas, también cinturones…múltiples son las posibilidades y reciben prendas nuevas todas las semanas, sus ‘mini colecciones’.
Las composiciones de sus tejidos también me interesaron y encontré acrílicos, algodón, viscosa, elastán e incluso alguna chaqueta de mohair. Entre sus básicos: camisetas de licra, jerseys, pantalones, entre los que también había leggins, y esperaban la llegada de la colección para una zona del local dedicado al denim. Como me indicaron las caras visibles de Okeysi en el Berceo se trata de prendas fáciles de lavar y con un deseo común, poder disfrutar de las tendencias, en ropa más desenfadada o prendas de noche.
Mucho donde elegir y el principio de seguir siempre la moda.