Primer día de rebajas en Logroño /Fotografía de Díaz Uriel
Todavía quedan ganas de comprar después de Navidad. No había más que ver este sábado 7 de enero las zonas comerciales de Logroño para darte cuenta de este detalle, sin olvidar, que es también en este día se juntan los descuentos de las rebajas con los cambios de algunos regalos de los Reyes Magos por los típicas cuestiones de confusión en las tallas, preferencias de color en el obsequio e, incluso, por la falta de acierto de algunos (aunque yo soy de las que piensa que los regalos a no ser que sea porque uno no puede hacer uso de ellos “nunca hay que cambiarlos”, pero eso es sólo una romántica opinión).
El comercio riojano abrirá las tiendas este domingo, fue uno de los festivos que se decidió en el calendario para este 2017, y seguro que será un buen día para ir de tiendas. Pero no nos volvamos locos, hay que saber aprovechar las rebajas, pero para evitar problemas hay algunos consejos que la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) siempre nos recuerda y que a veces los solemos pasar por alto a pesar de su utilidad.
Hay que repasar el armario, pensar con tiempo lo que de verdad necesitas o te gustaría, despacio, siendo realista. Es un buen momento para hacer fondo de armario. Nos aconsejan hacer una lista. El objetivo es evitar esas compras compulsivas que no llevan a ninguna parte, ni para nosotros, ni para el propio comercio. Si no llegará el momento en que nos preguntaremos ¿para qué compré esto? O no lo usaremos nunca, siendo un gasto absurdo o habrá que volver a la tienda, pedir el cambio. Todo será una pérdida de tiempo.
Aunque parece obvio, los productos que adquiramos deben haber formado parte de la oferta habitual del establecimiento durante al menos, un mes. Solemos saber que han estado en sus perchas, en las estanterías o expuestos los días anteriores, porque les hemos echado un ojo si es un comercio de los que conocemos bien.
La calidad no puede diferenciarse en nada de la que tenían antes de estar rebajados, nos indica la OCU.
Hay que mirar las etiquetas. En ocasiones no nos apetecen este tipo de comprobaciones, pero se tarda un segundo. Nos enamoramos de algo y no nos fijamos ni en cuánto se ha rebajado. Error. Tienen que tener su precio original junto al rebajado o indicar de forma clara el porcentaje de la rebaja.
Además, en algunos comercios se establecen unas condiciones especiales para las compras en periodo de rebajas (sobre la aceptación del pago con tarjeta, las devoluciones, etc) Es una creencia popular que esta decisión no está permitida y sí, pueden hacerlo, pero esto debe indicarse expresamente. Si no lo tenéis claro, lo mejor es preguntar al responsable del establecimiento, como toda la vida. Sin timidez ninguna, así evitaremos un conflicto innecesario para la tienda y para nosotros.
Descartar esa mala costumbre de tirar el tique en la primera papelera que te encuentres. Hay que conservarlo, así como una factura simplificada de la compra. Aunque en el primer momento nos parece que no lo vamos a necesitar para nada, si luego lo queremos cambiar o reclamar algo nos arrepentiremos de haberlo tirado. Un consejo, si me lo permitís, guardarlo con cuidado en una parte de la cartera diferente a la del dinero (eso de meterlo en la bolsa suele tener como resultado que acabe en la basura con la propia bolsa cuando sacamos lo que hemos comprado).
Igual que cualquier día
Hay que quedarse con esta sencilla frase: que estemos en rebajas no cambia nada. El servicio postventa y la garantía son iguales que en un periodo en el que no se aplica ninguna rebaja.
Si tienes algún problema durante este tiempo de descuentos, hay que actuar igual que en cualquier otro momento, nos dice la OCU. Se recortan los precios, pero no los derechos que tenemos como consumidores: intenta llegar a un acuerdo en el propio comercio, con tranquilidad porque las normas están claras, son siempre iguales. Esto es lo que debe aportarnos la tranquilidad.
Si no consigues una solución amistosa tendrás que pedir la hoja reclamaciones. Existen sí, no suele ser un documento que se exija normalmente, pero tienen que tenerlas como en cualquier otro negocio. Es ahí donde debes escribir con claridad el motivo de tu queja.
En lo posible, procura elegir establecimientos adheridos al sistema arbitral de consumo, que ofrecen más garantías al comprador (en caso de desacuerdo se prestarán a resolver sus diferencias con el cliente de una manera rápida y gratuita), añade la OCU.
Si surgen problemas que no se resuelven en ese momento,la Organización de Consumidores anima a reclamar, pero lo mejor para todos es no tener que llegar a este punto. Es desagradable para el comerciante y el comprador, y si salimos de rebajas es para disfrutar ¿o no? Las rebajas se extienden hasta el 28 de febrero y habrá descuentos al principio del 50 por ciento, aunque en Logroño ya se pueden ver en escaparates del 60 y del 70 por ciento.
Qué las rebajas os resulten útiles, agradables e incluso divertidas.