No es que fuera el pasado un fin de semana muy afortunado para el baloncesto riojano, con una derrota justa del Campus Promete y un estreno gris tirando a negro del Clavijo. Y sin embargo, estoy ilusionado.
El primero es un equipo que me transmite buen rollo. Desde su entrenador, a las jugadoras, empezando por la capitana Paula Estebas. Me entretiene su juego, con los aires del descaro juvenil, y me parece motivante para los aficionados, aunque creo que quedan muchos pasos que dar hasta llegar a un equilibrio, tanto defensivo como ofensivo, que les dé la estabilidad necesaria para no pasar apuros en la LF Endesa.
El Reina Yogur (que así se llama ahora el Clavijo tras la llegada del patrocinador a la camiseta azul y blanca) no pudo empezar peor, recibiendo 35 puntos en un cuarto. Hasta en la NBA cuesta verlo. Pero, aparentemente, los mimbres para no pasar los dolores de cabeza de años anteriores son buenos. Hay atletas espectaculares, veteranos solventes y jugadores con recursos para un proyecto en un año fundamental para generar ilusión (y no hablo de ascenso, precisamente) o perderla definitivamente. Por el bien del basket regional, confío en lo primero.
Y, además, este sábado comienza la andadura del Cocinas.com en la Liga EBA. No lo hace en las condiciones que hubieran deseado el Logrobasket ni Nacho Arbués, pero es lo que hay y lo que toca en estos tiempos tan complejos. Seguro que dan más de una alegría a los incondicionales que les han apoyado en este ascenso meteórico hasta esta categoría.
Que les vaya muy bien a los tres. Lo necesitamos.