(Opereta en dos pactos)
Personajes:
Don Mariano della Casta (bajo), Duque de Génova
Sor Aya (soprano falcon), confidente y mano derecha del Duque
Bertino «il Bambino» (contratenor), hijo bastardo del Duque
Pedrusco «il Decoroso» (tenor dramático), jefe de los Ferrazzi
Paolo «il Coletto» (tenor spinto), caudillo de los Indignati
Garzone (barítono), cabecilla de los Disederati y secuaz de Paolo
Susanna (soprano ligera), Baronesa degli Ere
Hada Karmena (contralto), bruja bicéfala
El Vizconde de La Junquera (bajo obstinado), rebel almogáver
Flippo VI (tenor lírico), rey de Castilla y poco más
Barones, sicarios, bufones, cortesanos y cortesanas, la gente.
Acción en las postrimerías del Reino de España.
Pacto I. Seis meses antes.
Tras años de absolutismo, el ducado de Génova decae pasto de la corrupción sin que Don Mariano della Casta, atrincherado en su palacio, mueva un dedo para frenarla (aria «Luigi, essere forte»). La crisi del mattone (ladrillo) causa hambre y desempleo y del descontento popular surge el movimiento de los Indignati, liderado por Paolo, joven y ambicioso comediante apodado Coletto, que cambia tablas por armas para derrocar al Duque (aria «Basta giá!» y coro de indignados «Morte alla Casta!»). Ante la pasividad del duque, el rey Flippo encomienda el ducado al clan de los Ferrazzi, enemigos mortales de los Casta, cuyo jefe Pedrusco «el Decente», hechizado por la bruja Karmena, consigue pactar con Bertino, hijo natural del duque (dúo «Tutti siamo citadini»), pero el acoso de los Indignati malogra la coalición y la insurrección acaba en lucha de todos contra todos. Las defensas de Génova, capitaneadas por Sor Aya («Comanda uovi!»), resisten el asedio y las tropas se retiran a sus cuarteles de invierno (grandioso final «In giugnio rittorneroi!»).
Pacto II. Seis meses después.
Rota la alianza entre Bertino y los Ferrazzi, il Coletto planea sobrepasar a Pedrusco y hacerse con el ducado. Con ayuda de la hechicera alcanza un pacto con los Diseredati de Garzone y juntos asaltan la fortaleza ducal (coro «Uniti possiamo fare il Sorpasso»). Para combatir junto a los Casta, Il bambino exige la abdicación de su padre putativo, quien finge entregar el mando a Sor Aya («Sono galiziano, non sapete se vado o vengo»). En un audaz golpe de impostura, Paolo se erige en paladín del ferrazzismo, debilitando más a un Pedrusco que acaba triturado por sicarios de la baronesa Susanna, nueva jefa del diezmado clan (arietta «Brindo con lambrusco il fine di Pedrusco»).
Con ayuda de los Diseredati y las huestes rebeldes del Vizconde de La Junquera, los Indignati logran izar el pendón morado de Flippo en la barbacana de Don Mariano y el nuevo Duque Paolo, tras fumarse el ducado en un mes, instaura un régimen de terror con los Casta perseguidos a muerte, Bertino desterrado y los Ferrazzi sometidos (coro «Va pesoero, sull’ali d’orate»). El éxito del Sorpasso es total («racconto de Paolo «In un paese lontano… ¡Chévere!»).