Confieso que no conseguía entender el porqué de la crisis financiera hasta que vi el vídeo de Leopoldo Abadía sobre “su” teoría Ninja. ¿Que todavía no lo has visto? Lo tienes en YouTube: no hay más que teclear “Teoría Ninja, Leopoldo Abadía” y aparecen varias entrevistas con él. Después de escuchar a este profesor de Economía ya jubilado, se entiende mucho mejor la situación.

Con un lenguaje adaptado a todos, lejos de la jerga de las “subprime” y demás, explica las causas de esta crisis. Explica que el precio del dinero en EE.UU. bajó mucho, el mercado inmobiliario iba viento en popa y las entidades empezaron a dar préstamos más arriesgados a un tipo de clientes, los “ninja” –que dan título a su teoría-, que corresponde a las iniciales de las palabras inglesas “no income, no job, no assets” (o sea, “personas sin ingresos fijos, sin trabajo, sin propiedades”). Al ser hipotecas más arriesgadas, se cobraban más intereses. Además, las hipotecas eran superiores al valor real de la vivienda, con lo cual los “ninja” se compraban coche, hacían reformas, se iban de vacaciones a lugares exóticos, etc.

¿Por qué la crisis financiera es mundial y no sólo estadounidense? Porque las entidades financieras se prestan dinero entre ellas, y los bancos necesitaban dinero para financiar sus préstamos porque habían dado muchos, pero muchos, en un sistema con un débil control bancario, no como en España. ¿Y para qué está la globalización? Pues entre otras cosas para pedir dinero a otros bancos de cualquier lugar del mundo a cambio de paquetes de hipotecas, buenas algunas o malas otras como las “subprime”, las de los “ninja”. Pero el mercado inmobiliario deja de subir –con lo cual la vivienda no se revaloriza-, los tipos de interés sí suben, en cambio, y los “ninja” ya no pueden pagar la hipoteca y ahí se lía todo, porque los bancos empiezan a no fiarse entre ellos, ni de nadie, y hay menos dinero en circulación.

Y el Euríbor también sube, claro. Al subir los préstamos, nos queda menos dinero para comprar, y si compramos menos coches, por ejemplo, el fabricante de coches se da cuenta de que los concesionarios le piden menos y despide a bastantes trabajadores porque fabrica menos. En fin, todo esto se puede leer de forma más extensa y mejor contada en el exitoso blog www.leopoldoabadia.com .

Lo que no cuenta el profesor Abadía y yo no me explico es, cómo es posible que con tanto experto financiero y tanto gurú económico, pudiera pasar esto. Porque los responsables no son los “ninja”, sino los que asumieron esos enormes riesgos. No nos dice, tampoco, hasta cuándo va a durar esto, ni hasta dónde va a llegar la crisis, ni por qué el nuestro es el país en el que más empleo se destruye de Europa.

Lo que sí ha demostrado este profesor jubilado es que hasta la situación más complicada se puede entender si se quiere y sabe explicar con sencillez. Los ciudadanos, aunque no seamos expertos en economía, tenemos derecho a que nos expliquen bien las cosas, y para ello hay que tener la voluntad y la capacidad de hacerlo, con claridad, sin jergas, sin tecnicismos y sin ocultaciones. Los responsables económicos de turno no lo han hecho; es más, en España, hasta hace poco, no se podía hablar de crisis. Ha tenido que venir Leopoldo Abadía a ofrecernos una explicación clara. Y es que, hablando claro se entiende la gente.