Deberes para el verano
Al acabar el curso, si me quedaba en Logroño, tenía que hacer siempre un rato de deberes por la mañana. En verano adoraba ir a Tormantos con mis abuelos, entre otras cosas, porque no me ponían deberes en todo el día, y eso que mi abuelo era maestro. No recuerdo el detalle de los cuadernos […]