La suplencia de Casillas ha servido para plato de buen gusto para las tertulias nocturnas que protagoniza esa fauna periodística forofa nocturna. Más que informar se busca el lucimiento personal. Las detesto. El periodista ha pasado a ser protagonista y no recela de pregonar a los cuatro vientos la camiseta que defiende. A mí me gustan las radiofónicas. Se intercambian impresiones, criterios e informaciones sin voces ni ataques personales. No hay sensación de protagonismo entre los tertulianos. Con la nueva temporada, nuevos programas televisivos. Hay que enganchar a los televidentes y buscar carnaza fresca. Me contaron que la última servida en un par de ellos fue el posible interés del Barça por Casillas. En una se llegó a comentar de una primera toma de contacto del club azulgrana con el entorno del guardameta. Todo vale para tener un minuto de gloria o por acaparar el ‘share’. Me parto de risa. El rumor del posible fichaje del Barça por Casillas suena a guasa. El que se lo quiera creer, problema suyo.
Que sepamos todos, Iker tiene contrato con el Real Madrid hasta 2017 y su cláusula de rescisión la tiene fijada en 150.000 euros. Vamos, que no veo al Barça depositar esa cifra en la LFP, ni la mitad, la cuarta, tercera parte ni ninguna. La teoría de la conspiración se cae por su propio peso. Por favor, más rigor. El humor negro o británico, para otros programas. Bueno, doy ideas a ‘los’ lumbreras de turno. Puede haber tres opciones para que el fichaje pudiera concretarse. Primera. Casillas pida un crédito y avale su fichaje. Segunda. Florentino y Rosell intercambien cromos (Casillas por Messi). Tercera. Un candidato a la presidencia al Barça emule a FP y logre convencerle para vestir de azulgrana, y de esta manera, devolver el golpe por lo de Luis Figo en 2000. Improbables todos estos supuestos. A lo mejor pudiera surgir otro. Lo esperaré tumbado en la cama, y puesto, con los auriculares de la radio.
Por favor, más rigor. Un equipo que no ha querido hipotecarse y que prefirió no abonar los 58 millones que el Chelsea le pidió por David Luiz y que ha fracasado dos veranos consecutivos en el fichaje de Thiago Silva ofreciendo cantidades insuficientes para el PSG, no tiene ninguna lógica que se lance a la contratación de Casillas para suplir a Víctor Valdés para el próximo curso. Eso sí, el incendio que se está montando en cuadro merengue le viene de perlas al club azulgrana, donde seguro más de uno se está frotando las manos por el ruido mediático.
No veo a Casillas calentando el banquillo toda la temporada. Ancelotti ha apostado por Diego López. El gallego se merece un respeto. Además, va a tener que sacar fuerzas para soportar la presión. Cada partido que juegue se le va a mirar con lupa por parte de la crítica afin a Casillas. El italiano deberá dar sus razones al madrileño si mantiene su decisión. Seguro que lo hará. A él ahora le toca apechugar, apretar los dientes, trabajar y esperar su oportunidad. Es cierto que la disputa del próximo Mundial podría condicionar su futuro. Llegado el caso le tocará a él decidir. Otra razón para no verle vestido de azulgrana. En la Premier habría tortas por él, pero llegado el caso ¿a qué precio lo traspasaría el Madrid? Que le grite un reducido y minúsculo sector de la afición merengue es anecdótico. No entiendo que se publicite tanto este caso. En todos los equipos siempre hay y habrá siempre un futbolista que no sea del agrado de una parte de la hinchada. Para eso están los gustos y los colores.
La suplencia de Casillas tiene otra lectura. Con morbo. Por su conexión con el Barça. Al final, el Real Madrid tendrá un portero en la lucha Casillas-Diego López como desde mediados de los 70 hasta los 80 la hubo entre Miguel Ángel y García Remón. Ambos alternaron el marco blanco sin tanto ruido mediático. El duelo de porteros madridistas se trasladará a otro escenario y con otro actor invitado: Víctor Valdés. Todo un marrón para Del Bosque. Un regalo envenenado. El seleccionador no dudó en convocar a Casillas para la pasada Confederaciones tras su lesión en los últimos meses del pasado curso, como antes lo hizo con otros futbolistas en otras citas puntuales, pero si su ostracismo se prolonga a corto plazo, ¿cómo justificar la titularidad en La Roja de un meta fuera de la portería? El 6 de septiembre nos enfrentamos a Finlandia y en octubre llegan otros dos compromisos señalados en rojo para certificar el pasaporte para el Mundial. Del Bosque deberá sacar la vara de la justicia. El debate de la portería será entonces de índole nacional. Otro duelo Madrid-Barcelona, pero a nivel de entornos. Las dos Españas futbolísticas, frente a frente. Más carnaza nocturna.