En la primavera de 1960 Yagüe celebró por todo lo alto las fiestas del barrio, que solían coincidir con el día del Corpus Christi, y sus vecinos los hicieron con diferentes actos, entre ellos la actuación de su grupo de danzas. Años atrás, el 16 de octubre de 1954, el general Francisco Franco había entregado a los vecinos las primeras 198 viviendas del denominado ‘Grupo General Yagüe’. Aprovechando el viaje, el jefe del Estado también inauguró en la capital riojana el grupo de viviendas de Las Gaunas, el nuevo edificio del Instituto Provincial de Sanidad, el sanatorio antituberculoso de La Estrella –ahora Hospital de San Pedro– y la Residencia –antiguo Hospital San Millán–.
Marina Ruiz Rioja
En la fotografía aparece el Grupo de Danzas de Yagüe, creado por Marina Ruiz Rioja –que todavía vive, con 86 años–, bailando ‘El arco de Segovia’. La niña de blanco, que se alza en lo más alto, es Mariví Espinosa, que entonces tenía tres años, y que todavía sigue viviendo en la popular barriada.
Entre las otras chicas que aparecen bailando –ataviadas con un llamativo traje de color rojo– se encuentran Valle, Cuevas, Valvanera, Sole, Blanca, Chelo, Mari Tere, Juani Ángela y Raquel y, entre el público, se distingue a Cruci (hermana de Raúl Ruiz, jugador de fútbol y comentarista deportivo de Canal +); a Gonzalo, actual presidente del Yagüe CF, y Pachi, del bar Moreno, entre otros. El grupo solía actuar en el teatro Bretón, en el Sanatorio de San Pedro o en la Prisión Provincial.
Uno de los aspectos más curiosos de la instantánea es cómo estaba es barrio hace 53 años. El baile tuvo lugar en una explanada en la que, años después, se levantarían las Escuelas Públicas y, hoy en día, ocupa el Centro Cívico.
Un barrio sin urbanizar
Atrás del improvisado escenario, se encuentra la calle Valdegastea, con la casa de Zacarías Martín, que todavía existe, y otra casa de campo que desapareció hace años. Y es que el paisaje de Yagüe ha cambiado mucho en este tiempo. De hecho, el barrio se habitó sin estar urbanizado y las viviendas se entregaron sin la preceptiva cédula de habitabilidad por deficiencias en su construcción.
Precisamente, en ese mismo año de 1960, el primer párroco del barrio, Ricardo Gil, envió una carta al director general de Enseñanza Primaria, en Madrid, exponiéndole el problema escolar que sufrían las familias: el colegio previsto inicialmente no llegó a levantarse y las clases se impartían en una vivienda. Las escuelas se inaugurarías en 1963.