Fueron los sesenta años de fiebre musical. El estallido del fenómeno beatle en todo el mundo –La Rioja incluida– y el deseo de apertura entre la juventud española desencadenaron un despertar de la cultura musical, que se tradujo en una gran proliferación de grupos pop, entre ellos Los Siderales, que nacieron en 1964.
Un año antes, cuatro jóvenes logroñeses habían fundado la banda Los Ducados de Plata, que actuó en teatros como el Bretón, el Moderno, o el de Educación y Descanso, en la calle Los Baños. Como no había Internet, aquellos músicos aficionados escuchaban sus canciones favoritas en algún tocadiscos prestado o en las máquinas de discos de los bares, sacaban a oído los acordes y ensayaban en bajeras de mala muerte.
Cuando Los Ducados de Plata se disolvieron, dos de sus componentes –Serafín Galiana ‘Fino’ y Santiago Santo Domingo ‘Santi’– plantearon a Enrique Facerías y José María Larrauri formar un nuevo grupo, que bautizarían como Los Siderales. El nombre tenía su gracia, pues se inspiró en la Guerra Fría que Estados Unidos y la Unión Soviética disputaban en el «espacio sideral» con sus cohetes y sus sputniks.
El Festival de Intérpretes de la Canción Moderna, que Radio Rioja organizaba en El Espolón, presentado por Fernando Asensio, sirvió de trampolín para los músicos –Los Siderales entre ellos– que perseguían el éxito más allá de las fronteras riojanas. Y es que compartir escenario con estrellas como el Dúo Dinámico o Raphael, en aquellas noches de septiembre, ya era todo un premio. La marcha de Enrique Facerías propició un cambio sustancial de la banda, con la incorporación de Ángel Javier Latorre, que había actuado con éxito en el mencionado festival, y del teclista José Juan Abanto, hasta entonces en The Red Demons.
A esta etapa de Los Siderales corresponde la imagen que hoy llega a la Retina: Ángel Javier Latorre (cantante), Serafín Galiana ‘Fino’ (batería), José María Larrauri (bajo), Santiago Santo Domingo ‘Santi’ (guitarra ) y José Juan Abanto ‘Pepe’ (teclado). Durante años, el grupo actuó en los locales emblemáticos de la ciudad (Rex, Ducal, Bolo Pin Club, Atenea…), aunque también tocaron en La Rioja y provincias limítrofes.
En 1965 el grupo ganó el primer premio en el citado Festival de Intérpretes de la Canción Moderna, dotado con 20.000 pesetas, lo que en aquella época era un Potosí.
Décadas después, en diciembre de 1998, Los Siderales (Ángel Javier, Pepe, Berna, Fino y Santi) volvieron a juntarse y actuaron en el Auditorio Municipal junto a Chema Purón y a otros ‘jóvenes’ de los sesenta.