Dice el refrán que «sólo se acuerdan de santa Bárbara cuando truena». Pero en el antiguo cuartel de Artillería de Logroño, sito en la calle General Urrutia, se festejó durante años a la patrona del arma, y con actividades muy amplias. En la imagen, que conserva el Archivo Jerónimo Jiménez, puede contemplarse un acto castrense de preparación para la fiesta de santa Bárbara, a mediados de los años 80.
Miles de riojanos, y mozos del resto de España, cumplieron entre sus muros el entonces obligatorio servicio militar. Y lo hicieron bajo el arma de Artillería, desde finales de los 60 hasta 1996.
Cada 4 de diciembre, el Cuartel General Urrutia organizaba un amplio programa de actividades que el que tomaban parte jefes, oficialidad y tropa. No podía faltar, por supuesto, el desfile de los artilleros, que tenía como marco el patio de armas, y para el que se practicaba a lo largo de los meses anteriores, ni la misa de campaña, en el mismo lugar.
Los deportes eran la base de los festejos para los soldados rasos: atletismo, baloncesto, ping-pong y, por supuesto, fútbol. Entre los actos culturales destacaban el espectáculo de parodias, chistes –lo que hoy serían monólogos–, y música variada, o los concursos de poesía sobre la patrona o el ardor artillero, todo ello complementado con una comida algo más elaborada que la habitual –el restaurante, desde luego, no competía por una estrella Michelin–, y regado todo ello con el alcohol a discreción que salía de la cantina.
Antiguos cuarteles
Hagamos un poco de historia. El primer cuartel de Artillería con el contó Logroño tras las Guerras Carlistas se construyó en 1878, en lo que hoy se sitúa el Ayuntamiento de la ciudad –obra del arquitecto Rafael Moneo–. Fue bautizado como cuartel de Caballería Alfonso XII en honor al entonces rey de España y, tras diferentes cambios, acabó sus días como Doce Regimiento Ligero de Artillería.
A finales de la década de 1960, el cuartel que daba a la calle General Franco –actual avenida de la Paz– fue derribado, y el regimiento artillero se trasladó a General Urrutia, otro acuartelamiento del siglo XIX, que había sido inaugurado el 28 de enero de 1887.
Hasta 1996, fecha en la que fue víctima de la piqueta, acogió el Regimiento de Artillería de Campaña RACA 46, sobre cuyo solar se construyeron –casualmente– las palazzinas Moneo.
Santa Bárbara siguió celebrándose en el acuartelamiento ‘Héroes del Revellín’ de Agoncillo, sede del Regimiento de Artillería Antiaérea (RAAA 82), que dejó La Rioja a finales del 2008.
La festividad, no obstante, se mantiene en localidades riojanas como Corera o Tudelilla.