Todo tiene un fin. El pañuelo morado ya empieza a rezumar humanidad tras tantos días puesto (el de color azul no… que sólo estuve en txamizo del PP un día). Las calles retoman su tranquilidad y sus coches. En breve tendré que volver a pagar la maldita ORA… Vamos, que os váis dejando las fiestas por el camino… Se acaban las movidas mateas, riojanos míos.
Y como me quería reconciliar con mi amigo Francisco Javier le di ayer la tarde libre para que quedara con compañeros de trabajo y recogí a Puy en el portal de su casa logroñesa para ir con ella y unas amigas riojanas a eso de pisar uvicas en la Plaza del Ayuntamiento. Puy ha vuelto con energía. Ya me dijo: “Te he seguido estos días vía larioja.com. ¡Contenta me tienes!… No sigues mi recomendaciones que tan bien plasmaste hace unos meses… ¡Tú veras!”
Os la recuerdo en cursiva y color vino que mola más…
“Hay que decir SI cuando hay que decir que SI. Y soltar un NO cuando hay que decir que NO. Hay que reirse de tu Reyno si es necesario aunque sea por una tontería o algo falso (como casi todo lo que se dice en vuestras tierras en contra de la Comunidad Foral)…”
https://blogs.larioja.com/inavarro/2014/02/05/el-autobus-innombrable/
Porque según ella os he metido mucha caña. Me he dejado llevar por mi foralismo en terreno hostil. He dejado desprotegidas mis defensas para que me podáis atacar. Y eso no es bueno del todo. Pero lo hecho, hecho está. Ya no hay remedio. Sigamos con la fiesta pues.
Y la fiesta ayer estaba en el pisado de la uva por pies riojanos y extranjeros. Las amigas de Puy a las que desde aquí les doy miles de besos y abrazos forales me dijeron que eran uvas de gran calidad traídas de campos de La Rioja, que no me empeñara en pensar que eran de otro sitio porque no. Yo es que las vi muy buenas, y pensé que eran de mi tierra (como todo lo bueno que hay en el mundo)
Y como mi madre dice que allí donde fueres, haz lo que vieres… pues me descalzé mis Converse nuevas de gafapasta y me lanzé a la invitación riojana.
Yo pisé uvas.
Las machaqué.
Las destrocé.
Quería aniquilarlas.
Muerte.
Me entró un odio un tanto extraño….menos mal que Puy estaba cerca. Me agarró de la mano y me dijo: “Recuerda mis mandamientos, pequeño padwan navarro…”
Desde aquí te doy las gracias una vez más estellica de mi alma… Me ayudaste a mantener la compostura.
Gracias.
Menos mal que hoy no voy a ir a la quema de la cuba. Esa cosa que organizáis esta noche y que tanto se parece a la quema de Marijaia en Bilbao para acabar las fiestas… (¿será un momento inspirador de las fiestas matea? O realmente vosotros tenéis el copyright del acto. Tendré que investigarlo…)
Y no voy a ir porque me voy a cambiar de pañuelo. Que señores riojanos… Si os queda algo de energía la Consejería de Turismo de mi Reyno me da permiso para que paséis la frontera del Ebro a partir de esta noche y os vengáis a las segundas mejores fiestas del mundo. (Las primeras son en julio, no confundir con las vuestras que os conozco…) Las fiestas pequeñas de Pamplona. La versión otoñal de lo más importante del año en mi Reyno…
Sí. San Fermín Txikito..
Así que guardad vuestros pañuelos morados, azules y sacad el rojo. El auténtico que muchos decís que es vuestro y ponéoslo con orgullo… Y venid a Pamplona.
Quizá ahí también descubráis que hay buenas fiestas más allá de vuestra casa y que también nos lo podemos pasar bien todos juntos como yo lo he hecho estos días.