Yo elegí una profesión en la que no hubiera que madrugar. Sólo lo hago con gusto nueve días en el mes de julio para comerme unos churros con chocolate mientras veo los encierros, que son el buque insignia de todo pamplonica de pro. Por eso el día de hoy ha empezado mal porque había quedado pronto para ir a ver el incio de vuestras fiestas y me quedé dormido. Qué le voy a hacer. Pero a eso de las nueve y media sonó este soniquete en mi móvil…
Porque si hay que meterse en harina riojana… yo que soy un radical como buen navarro, hay que hacerlo con todas las consecuencias…
Y me levanté alegre a ritmo a ver el COHETE
‘cuhete’
Txupinazo! (Con Tx como exige el protocolo foral que impera desde las últimas elecciones…)
Riojanos míos, llevo varios años yendo al logopeda, haciendo hipnosis y recibiendo descargas eléctricas para no cometer el error de llamar ‘Txupinazo’ a eso que hacéis en el mojón de Ayuntamiento que os hizo mi compatriota Moneo. Iba caminando por las calles vacías a esas horas. Que tampoco es que seáis una ciudad que el día del txupi-cohete madruguéis mucho…
Y vi lo típico de una mañana previa al cohete riojano: Niños vestidos de blanco con banderas riojanas y litros (si se puede llamar ropa a lo que llevan) que parece que van a la discoteca Suit y no a un acto festivo; logroñeses con el periódico en la mano paseando al perro (os amo a todos con locura los que lo hacéis cada mañana) y gente sonriente… Pero nada de nervio. Nada de prisa… Una mañana de domingo tranquila…
Y yo, que me subo al carro enseguida, quedé con Puy mi amiga estellica que hacía tiempo que no veía.
-¡Vamos que nos vamosss!- le grité
Ella, muy seria me comentó que había decidio este año no acudir a la Ayuntamiento-Mojón y verlo desde un bar cerca de la Estación de autobuses por si había que coger la Estellesa y salir corriendo de tierra hostil (Anda un poco rebotada con vosotros últimamente. No sé… Creo que os está cogiendo cariño y se enfada consigo misma).
Y lo vimos por la tele, que como en Pamplona en San Fermín he llegado a la conclusión de que es el mejor lugar para verlo.
Y compararlo. Como no.
Y llegar al a conlusión que ya sabéis…
No hay color.
De ningún tipo. Nosotros en nuestro txupinazo vamos de blanco (vale, no hay color). Vosotros cada uno como dios le dio entender (demasiado color). El nuestro es puntual y es anunciado por Timbaleros de gala. El vuestro es una fiesta con geráneos rojos en los balcones anunciado por Carlos Jean… En nuestro txupinazo hay un crisol de banderas de todas las regiones y Estados… En el vuestro no. Eché de menos una bandera de Grecia, una ikurriña en honor a nuestros queridos vecinos de Oyón… Esas cosas que en Navarra se ponen de moda últimamente… Aquí no.
Puy y yo comimos como cosacos y bebimos vuestro vino mientras almorzabamos en el bar (Ella siempre con el dinero en la mano para comprar un billete por si había que huir). Y luego después del ‘txupi-cohete’ fuimos a la San Juan y bebimos vuestro vino. Acabamos en Portales y bebimos vuestro vino… Y ahí me perdí. Busqué un faro de guía en el hogar navarro y decidí quedarme un rato a reposar para venir a contaros esta experiencia incial mañanera.
Dura.
Ya os digo. Si va a ser así este año.. Igual me retiro a mi Reyno antes de tiempo…