Acabo de comerme una cuajada del valle de Ulzama, con mermelada de zarzamoras, recolectadas ayer mismo en las orillas de la Yasa de Murillo por mis tres hijas y, espectacularmente cocinada por quién todo lo hace bien… mi esposa. ¿Puede haber algo más estupendo que llevarse a la boca?. Antes de irme a la cama, […]