Hoy en el Parlamento de la nación han sucedido varias cosas importantes…el Gobierno ha sacado adelante la prórroga para que los controladores aéreos sigan militarizados. Me parece bien, incluso escaso. Yo los militarizaría para toda la vida, y cobrando el sueldo de un sargento.
Otra cosa interesante ha sido ver como el Partido Popular se ha acojonado ante la votación y aunque el cuerpo les pedía votar en contra se seguir en estado de alarma…se han abstenido para no tener que dar explicaciones a la ciudadanía si llegan a apoyar a los millonarios chantajistas.
Pero voy a centrarme en otra de las cosas que han sucedido. Previo a las votaciones, un grupo de diputados no han atendido los avisos para acceder al hemiciclo. El presidente Bono, transcurrido el tiempo reglamentario ha ordenado el cierre de las puertas para proceder a iniciar la sesión de votaciones. Una vez iniciada, esos diputados (serían de todos los partidos) han pretendido entrar a votar y no les han dejado. Han aporreado la puerta infructuosamente.
¿Qué coño hacían estas señorías?…tal vez leían la prensa, fumaban un pito, o tomaban una copa de brandy…¿un café?. Sea cual fuera la razón, dejarlos fuera no me parece acertado…mejor sería expulsarlos un par de semanas, o directamente mandarlos a su casa y que otros u otras con mayor interés ocupen sus puestos.
Es vergonzoso ver como en muchas sesiones el parlamento aparece semi-vacío. Por no recordar los debates importantes en los que una vez intervenido los representantes de PP y PSOE, la inmensa mayoría de señorías – en un gesto intolerable- desaparecen camino del bar (en la mayoría de los casos).
Y no solo pasa esto en Madrid…también en Logroño donde he presenciado los interminables viajes de algunos diputados…no sé a donde carajo, sin hacerle el menor caso al diputado/a que se encuentra en uso de la palabra en ese momento.
Si no son capaces de aguantar una, dos o tres horas sentados en su escaño sin menearse…escuchando lo que tienen que decir los representantes de los ciudadanos, tal vez necesiten otro tipo de ocupación y un orinal de porcelana.