Con semejante frase se descorchó Benedicto 16 en su visita a Madrid. Pura demagogia interesada. No creo que nadie se avergüence del Señor. Más bien será que alguno -o muchos- se avergüencen de la jerarquía católica. Lo cual es bien distinto. Del Señor no se puede avergonzar nadie. Los cristianos no nos avergonzamos de Cristo […]