¿Es esta democracia el mejor sistema? | Como puños - Blogs larioja.com >

Blogs

¿Es esta democracia el mejor sistema?

La otra mañana, bien prontito, un grupo de ciudadanas/os ,personas normales y corrientes, observaban como una iniciativa popular de ellos, -refrendada por más de 4000 firmas- era debatida por los políticos del pueblo en el salón de plenos de su Ayuntamiento. Habían conseguido no sin muchos sinsabores forzar la celebración de un pleno extraordinario para tratar una iniciativa ciudadana que pretendía salvar el único parque de la localidad. Pese a llevar un año intentando que su propuesta se debatiera , no les dejaron ni defenderla ante el pleno, porque el alcalde no les permitió hablar. Y cuando un alcalde no permite a sus vecinos ni abrir la boca…algo está fallando en este sistema.

Dijo el portavoz del PP en el ayuntamiento de Calahorra que ya se consulta a los ciudadanos cada cuatro años….y la democracia perdió un poquito más de fuelle según esas palabras retumbaban en la sala.

.
Hoy en día estamos rodeados de demócratas por todas partes. Algunos ciertamente deben de serlo, pero otros tienen por democracia la herramienta necesaria para mantener el poder. La democracia que tanto se proclama y cacarea es de usar y tirar. Se usa cada cuatro años, y luego se limpia uno con ella el culo. Es la utilización interesada de la voluntad del pueblo. El trámite ineludible para conseguir el fin perseguido. En eso se ha convertido la democracia.

Como todo el mundo sabe, la dichosa democracia se nutre de las matemáticas. Tres manzanas frente a cuatro peras, tienen todas las de perder. Pero no es tan simple la división de fuerzas. Para calibrar las mayorías y las voluntades se evalúa el número de votantante pero no el de personas que habitan la ciudad. Ese número sería del que se debería partir a la hora de conocer la voluntad del pueblo, entendiendo el pueblo como al conjunto de personas que viven en una localidad. Pero en democracia, al final resulta que las matemáticas tradicionales no son tan importantes, y dos mas dos casi nunca son cuatro.

De las aproximadamente 27.000 personas que viven en Calahorra, resulta que tan solo una parte de las mismas están empadronadas, el resto prefiere pagar impuestos en Navarra, o en otras localidades de origen. De los restantes no todos tienen derecho al voto, existen ciudadanos sin empadronar (pero que viven allí) , emigrantes, miembros de etnias que pasan de formalismos, etc.

De los que van quedando, los menores de 18 años tampoco cuentan para la democracia. Al final de la criba democrática, se celebran elecciones y (un partido político) el PP recibe los votos de 6000 personas que no supone ni el 25% de la población. Pero resulta que ese escueto porcentaje trasladado al sistema “democrático” se traduce en mayoría absoluta aplastante. Un cheque en blanco para hacer y deshacer a su antojo durante cuatro eternos años.

Un dato evidente es que el 75% de la población no ha mostrado su apoyo a quienes se han alzado con la mayoría absoluta…curioso ¿no?.

Entre los que no han apoyado al que ha ganado están los que han votado a otros partidos, los que no pueden ejercer su derecho al voto por edad o impedimento administrativo, y también entre el 30 y el 40% de los llamados a las urnas, que pasan olímpicamente del sistema y de los que se presentan.

Pero aquí no acaba todo. El que con tan “aplastante apoyo popular” se alza con la mayoría absoluta, se cree envestido de la razón suprema y condena al ostracismo al resto de representantes públicos (la oposición), elegidos igualmente por los ciudadanos.

Se atribuye el respaldo mayoritario de toda la ciudad, lo cual matemáticamente es falso, e inteligentemente ridículo. Eso sí…electoralmente es cierto. Aunque pretender que por tener el apoyo de 25 de cada 100 personas, se tenga hasta derecho de pernada, es mucho pretender.

Cuando llega la temporada electoral, algunos políticos se acuerdan de la democracia, y de la importancia de los votos. Visitan mercados, solicitan reuniones con los colectivos sociales, reclaman ideas y apoyos, estrechan manos, reparten flores,en suma, prometen hasta que la meten.

Una vez conseguido el preciado néctar del voto, la democracia se aparca y durante cuatro años se vive del ejercicio democrático que todos los ciudadanos realizaron un Domingo.

Tenemos por tanto una democracia puntual, en la que nuestra decisión tan solo es consultada y tenida en cuenta una vez cada cuatro años.

Pero no todo es desolación. Existen otros tipos de democracia… la democracia activa, la participativa, la perenne, la engrasada, la democracia del día a día. La democracia de los amigos, la de familia…

Y la verdadera democracia.La consulta habitual y no cada cuatro años. El llamar a consulta a todos los ciudadanos ante casos de interés general.

.
¡Celebremos más elecciones…más consultas populares!, para temas cercanos, para problemas cotidianos, para que la democracia sea de ida y vuelta. Un instrumento de canalización del poder que debe emanar del pueblo, y no un préstamo a cuatro años, con garantía de reposición.

Por la libertad de expresión.

Sobre el autor


enero 2009
MTWTFSS
   1234
567891011
12131415161718
19202122232425
262728293031