No lo voy a negar. Yo pensaba en Indonesia y pensaba en Bali y Bali siempre lo relacionaba con playa ¡Qué equivocada estaba!
Empezamos a preparar nuestro viaje intentando utilizar un bono de compensación que teníamos de Qatar Airways por el retraso en el vuelo a Tanzania del año pasado (algún día contaré ese viaje) así que empezamos a investigar los destinos que ofrecía la compañía.

Y nos centramos en Indonesia porque según lo que leímos en cientos de foros y lo que nos aconsejaron algunos amigos que habían estado, encajaba bastante con el tipo de viaje que queríamos hacer: poder ir por tu cuenta, ver cosas muy diferentes entre sí en 15 días, una cultura completamente diferente, paisajes inolvidables, animales únicos, gente maravillosa…
Así que una vez que cogimos los vuelos internacionales, quedaba lo más difícil: ¿Qué ver en Indonesia? No es fácil y sabes que vas a tener que dejar muchas cosas sin ver, pero busques lo que busques, allí lo vas a encontrar.
Al final, nuestra ruta entre las más de 17.000 islas que forman este archipiélago (más o menos, no hay ni un solo sitio donde te digan exactamente cuántas son) quedó así (pincha para ampliar):

1. Jakarta, Java: La locura entre coches
2. Tanjung Punting, Borneo: Tres días recorriendo el parque natural en barco para ver orangutanes
3. Jogyakarta, Java: Borobudur, Pranbanam, mercado de los pájaros, palacio del sultán, Palacio del agua…
4. Bromo, Java: Volcán
5. Seminyak, Bali (Bali): Playa, marcha y surf
6. Rinca, Flying Fox island, Komodo, Bidadari, Labuanbajo e Isla de Flores en barco: Dragones prehistóricos, tribus del mar y buceo en el paraíso
7. Ubud, Bali: Templos, templos, templos

Podría decir que es lo imprescindible, pero todo en Indonesia lo es. Hay que tener en cuenta que las distancias son enormes, los vuelos tienden a retrasarse (aunque tuvimos muchísima suerte), las carreteras no son buenas y todo se vive con mucha calma. Así que si vas a Indonesia, deja atrás las prisas y los planes demasiado preparados y ‘menikmati’.