La lonja de pescado de Tsukiji es otra de las visitas que no se puede perder el visitante en Tokyo. Puede sonar desagradable meterse a las 8 de la mañana en el mercado de pescado más grande del mundo, pero realmente merece la pena, y no es para tanto. Nuestra idea era haber ido el primer día (aprovechando el jet lag) a la subasta de atún que se celebra de madrugada, pero el tifón nos fastidió el plan, así que nos quedamos sin verla, pero el mercado merece igualmente la pena.
Si es posible, lo ideal es ver las dos cosas, pero hay que tener en cuenta que la subasta se celebra a las 5 ó 6 de la madrugada y hay que estar allí un par de horas antes para coger sitio ya que la entrada es reducida, lo que significa que puede que te pegues el madrugón y no la veas. Pero todo el que la ha visto dice que merece la pena.
Nosotros nos conformamos con el mercado, que no es poco. Hay que madrugar mucho ya que si llegas más tarde de las 9 es probable que no veas ni un pez, llevar calzado que no te importe que se manche, tener mucho cuidado con los carros motorizados y, por supuesto, no tocar el género. Es un mercado serio, no una atracción turística.
Por la tarde noche nos acercamos dando un buen paseo hasta el río Sumida para ver la uno de los edificios más singulares y característicos de Tokyo es, el Asahi Beer Hall, especialmente conocido por la escultura que lo corona. Su nombre oficial es Flamme D’or, o llama dorada. Pero que no intenten engañarnos, esa cosa no es una llama.
En efecto. Se trata de una enorme mierda dorada, o como los japoneses la llaman kin no unko.
De allí, ya que estábamos en Asakusa, aprovechamos para volver a ver Kaminarimon y Sensō-ji, que habíamos visto el primer día paro bajo el tifón.
Se llega atravesando un montón de luminosos puestecillos en los que principalmente venden comida y souvenirs.
Lo mejor es pasear sin prisa, pararse en los puestos, mirar a los ojos a los dioses que flanquean la puerta o dejar del humo del caldero que hay junto a la entrada del templo de conceda salud hasta que toda la gente haya desaparecido.