He tenido una idea brillante o, mejor aún, brillantina. Ocurrió mientras me encaminaba al cubo de la basura para tirar este par de botas, con larga vida a mis pies.
Como no tenía nada que perder decidí poner en práctica la tendencia del glitter o brilli-brilli, que no es otra cosa que aplicar brillantina a prendas y complementos. A priori, este DIY me parecía un pelín engorroso e incluso llegué a imaginarme perdiendo brillantina a cada paso cual adorno navideño. Por suerte, descubrí que existe un pegamento impregnado de brillantina, más limpio y fácil de aplicar. Y así es como quedaron.
Si os dais cuenta, en las primeras botas había una serie de tiras de cuero como adorno. Pues a ellas también les he dado una nueva vida con algunas tachuelas que me sobraban de DIY anteriores.
FOTOS: JPEG
NOTICIAS!!!
La primera, con Palo de Sal en la Cafetería Niza.
Y el primer Showroom Logroño, el día 15 de diciembre en el Hotel Carlton.