¡¡No encuentro mis paraguas!! (utilizo el plural porque tengo dos).
En una reciente obra que hicimos en casa subimos todos los enseres domésticos al trastero, y mis paraguas no aparecen. No me ha quedado otro remedio que echar mano de los que utilizaba mi hija, en versión mini, cuando era pequeña.
Pero lo que empezó como necesidad, ha terminado en virtud. Ahora me encantan estos pequeños parasoles y no pienso dejar de usarlos durante todo el otoño-invierno. Vamos, que ni siquiera voy a molestarme en buscar los míos.
Este modelo tan otoñal nos lo regalaron en una tienda de ropa infantil (incluso lleva su nombre) y me gusta porque combina con casi todo y me anima los días lluviosos. Y lo mejor, tiene hasta un silbato colgando del mango, por si alguien se me malcruza por el camino.
Este otro es el modelo Disney, un clásico, con su Minnie y Mickey. La parte transparente facilita la visibilidad y deja pasar la luz; el color rojo sube el ánimo, y la combinación rojo/blanco de sus pequeños corazones le da un toque folclórico.
Mientras maquinaba este post se me ha cruzado otro paraguas en el camino, éste ya de persona mayor y muy riojano. Y aquí voy a barrer un poco para casa (sin que sirva de precedente), que la ocasión lo merece.
Se trata del paraguas que acaba de sacar Diario LA RIOJA para resguardarse de la lluvia entre paisajes, esculturas y monumentos de lo más riojanos. Un paisaje de viñedos, los monasterios de Valvanera y San Millán de la Cogolla y el perfil de Logroño desde el Puente de Piedra sirven de telón de fondo. ¿Los protagonistas? El general Espartero, un danzante de Anguiano, santo Domingo de la Calzada y Marco Fabio Quintiliano.
Debo reconocer que tiene cosas que me gustan más y otras menos.
¿Más? Las dimensiones, la textura del mango, su apertura automática, la gama de colores (blanco, negro y grises) y los paisajes que recorren la tela del paraguas.
¿Menos? Las esculturas y el danzante que se levantan en los cuatro vértices se me antojan demasiado grandes. E incluso el santo y el retórico, pelín compactos.
Con todo, las próximas navidades seguramente me haré con un paraguas para alguno de mis ‘amigos invisibles’.
Por cierto, se puede adquirir en los quioscos, hasta el 15 de diciembre, por 19,95 euros y los suscriptores de Diario LA RIOJA (como es mi caso) tienen descuento: 15,90 euros.
FOTOS: Enrique del Río
PD: Ya, ya lo sé. Muchos os estaréis preguntando por la ‘chavalita’ que me acompaña en un par de fotos. Pues es María José, una estupenda compañera (y amiga) que pasaba por allí…