Malamente
Ni serrín ni estiércol. Frente a los hábitos instalados en las Cortes del Reino, por el Parlamento de La Rioja reina el sopor. Del que sólo rescatan a los asistentes esos raros momentos en que comparecen sus señorías más adictas al espectáculo, como la vigorosa Bastida o la elocuente Grajea, con sus 50 […]