Soy un borrego
Abrumado por el peso de mi abismal ignorancia, esclavo de mis bajas pasiones y rehén de mis lúgubres instintos animales, me atrevo a confesarme ante ustedes, mientras me atizo con el flagelo y me aprieto angustiosamente el cilicio: Soy un borrego. Verán: resulta que me gusta el fútbol, vi casi todos los partidos de la […]