>

Blogs

piogarcia

Loco por incordiar

El dinerito de la Sgae

En todo este follón de la Sgae, ese pintoresco sindicato vertical de autores y editores, me quedan muchos hilos pendientes. Creo que en todos estos años hemos ido mezclando cosas. A mí también me repatea un poco esa ficticia costumbre del gratis total que se respira en internet. Todos admitimos como borregos que debemos pagar un doblón por la electricidad y por los tropecientos megas, pero nos parece peor soltar algunos eurillos para comprarnos un disco que nos gusta o un libro cuyo autor nos interesa. Bajárselos en plan pirata es bastante similar a entrar en una librería y mangarlos, así que quizá debamos utilizar los mismos criterios éticos para denunciar (o no) ambas cosas.

Pero ese no era el problema. Lo malo es que el Gobierno de Zetapé cometió la insólita barbaridad de tomarnos a todos por delincuentes. Imponer el canon digital fue tan osado (y tan canalla) como si ahora nos vendieran los coches con un impuesto extra para multas: como suponemos que usted va a correr de lo lindo, le cobramos ya por adelantado. Así que gente como yo, que jamás nos hemos bajado una miserable película pirata (más por pereza que por honradez), hemos sido directamente condenados y sancionados. Sin juicio ni nada. Olé la democracia.

Y aún peor fue darle por decreto a la Sgae y a don Teddy, ese viejo músico con nombre de osito, un chorro amazónico de dinero sin que jamás hayan aclarado cómo lo repartían. Del céntimo que yo pago al comprar un disquete, ¿cuánto le dan a Víctor Manuel?, ¿cuánto a Caco Senante?, ¿cuánto a Ramoncín? ¿Y por qué a ellos y no a otros? Ahora va a resultar que casi todo se lo llevaba un tipo que nunca escribió un triste verso.

Temas