
Escarbando entre mis viejas cassettes ayer encontré la maqueta de los bilbaínos TRAUMA. Recuerdo que pegaron duro a principios de los noventa y que lograron editar su primer álbum, el añorado “Destino Oscuro”, en 1994. Thrashcore muy de la época ( Beer Mosh, S.A.,… ) cantado en castellano y con unas letras de lo más variopinto. Imágenes de una escena que tuvo su momento álgido mientras el grunge, importado desde Seattle, causaba estragos entre los aficionados al género. Y es que nunca podré olvidar el estilo musical mezcla de Thrash Metal y Hardcore que , aunque esté fuera de juego, marcó mi vida.