Han pasado 17 largos años desde que este espacio llamado METAL PESADO comenzase su andadura en la blogosfera de Diario La Rioja. Diecisiete años de reseñas, entrevistas, crónicas y reflexiones sobre el universo del Heavy Rock y la escena metálica en general. Diecisiete años donde ha habido de todo, también con algunos momentos de actividad intermitente, pero siempre con la misma intención: compartir la pasión por esta música que nos ha hecho vibrar y sentirnos vivos.
Hoy toca decir adiós. La decisión no ha sido fácil pues me resistía a cerrar definitivamente el blog tras tantos años de actividad, pero por otra parte era inevitable. Los blogs hace tiempo que ya no reciben la atención ni las visitas de antaño; las formas de consumir información han cambiado y este formato ha quedado relegado a un rincón silencioso de internet. A ello se suma mi propio cansancio y desgaste, tanto en el mantenimiento de este espacio como en otros proyectos que he realizado a lo largo de las últimas dos décadas.
No lo interpreto como un final triste, sino como un cierre natural. Y quiero pensar que METAL PESADO, en su justa medida y pequeño hueco en internet, ha cumplido su función: dar voz a una escena, acercar discos y conciertos, y sobre todo crear comunidad entre quienes aman verdaderamente esta música. Abrí METAL PESADO con 35 años lleno de ilusión, y hoy, con 52, siento que ya no tengo nada más que decir ni contar.
Desde aquí quiero dar las gracias a todos los que alguna vez leyeron, comentaron o compartieron una entrada de este blog. También a las bandas que confiaron en este espacio para difundir su trabajo y al staff de larioja.com por su apoyo técnico y moral todos estos años.
Este blog se apaga, pero la llama de la música arderá por siempre en mi corazón.
Muchas gracias por todo. Ha sido un viaje maravilloso.
— Fran Gonzalo
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