El 5 de julio de 2025 quedará grabado por siempre en la memoria colectiva del heavy metal como una fecha histórica, la celebración de ‘Back to the Beginning’ (nuestro particular Live Aid), donde la ciudad de Birmingham fue testigo de un momento único e irrepetible: el último concierto de la formación original de Black Sabbath, la legendaria banda nacida en el seno de la citada localidad británica, en 1968.
Un evento celebrado en el reconocido estadio Villa Park que rozó las nueve horas de duración y que congregó en vivo y streaming en directo a más de dos millones de personas. Un concierto de despedida que no solo marcó el fin de una era, sino que también simboliza el cierre de un capítulo seminal en la historia del rock y el metal, dando paso a una nueva generación de sonidos y estilos musicales.
Al término de las diferentes actuaciones de las bandas y músicos invitados para la ocasión (Metallica, Slayer, Anthrax, Guns’n’Roses, Alice in Chains, Pantera, Tool, Gojira, Lamb of God, … ) que como sabroso anticipo y teloneros de lujo estuvieron participando en el show a lo largo de toda la tarde y que, a estas alturas, todos ya hemos podido ver y disfrutar en las redes sociales – los más afortunados de cuerpo presente en el Villa Park-, los cuatro fundadores originales y principales protagonistas del evento – tras la actuación previa del propio Ozzy haciendo un guiño a su carrera en solitario – tocaron juntos por primera vez en 20 años. Todo un hito si tenemos en cuenta la edad de estas leyendas (Ozzy Osbourne tiene 76 años, Iommi 77 años, Butler 75 años y Ward 77 años) y el tiempo que han estado distanciados en mayor o menor medida por problemas de salud y diferencias económicas.
Para el recuerdo y deleite del público interpretaron cuatro canciones escogidas minuciosamente entre sus dos primeros álbumes: ‘War Pigs’, ‘Iron Man’, ‘N.I.B.’ y ‘Paranoid’.
Black Sabbath, con sus sonidos oscuros, riffs pesados y letras introspectivas, sentaron las bases para los diferentes estilos musicales que vendrían después. Su influencia se puede escuchar en innumerables bandas actuales y su legado es indiscutible. Sin embargo, en el contexto actual, la música ha evolucionado hacia nuevos géneros, tecnologías y formas de expresión (próximamente os hablaré de los norteamericanos Blood Incantation, por ejemplo). La llegada de nuevos tiempos en la música trae consigo una diversidad que enriquece el panorama musical, aunque también provoca que eventos como el celebrado este pasado sábado en Birmingham sean aún más emotivos y únicos por su significado.
En definitiva, el concierto de Black Sabbath fue mucho más que una despedida. Fue un recordatorio de cómo la música puede trascender el tiempo, unir generaciones y dejar una huella imborrable en nuestra historia cultural. Aunque se cierre una etapa, la influencia de Black Sabbath seguirá resonando en las futuras generaciones, inspirando a nuevos artistas y recordándonos que, aunque los tiempos cambien, la magia del heavy metal perdurará para siempre.
También fue un recordatorio para nosotros, los fieles, de que nuestros ídolos son de carne y hueso, como nosotros, y tampoco van a estar ahí para siempre. Aprovechemos el momento para ver y disfrutar a esos grupazos que, como Black Sabbath, están dando los últimos coletazos de su carrera, porque quizás luego ya sea demasiado tarde.
Adiós, Black Sabbath.