Harto de abrir el buzón y ver que no tengo quien me escriba.

Harto de girar la pequeña llave y comprobar que sólo se acuerdan de mi Iberdrola, Gas Natural, la comunidad de propietarios…

Harto de levantar la pestañita y encontrarme la misma propaganda política, encubierta bajo los más llamativos colores, recordándome lo bien que lo hacen unos y lo mal que lo hacen los de enfrente…

No contentos con ganarse mis favores en cada rueda de prensa para que utilice esos mismos colores a la hora de vender sus acciones y desechar las de los demás, unos y otros mantienen una guerra sin cuartel por imponer sus criterios en mi buzón…

No contentos con colarse en nuestros hogares a través del periódico, la radio y la televisión (también, y no me olvido, de internet), ahora pretenden acompañarle a uno hasta su propia casa en el ascensor, justo en la mano opuesta a la ocupada con la barra de pan…

Baste lo que va de semana para ilustrar la novedosa tendencia: Así, si el lunes me esperaba una cuartilla con el manifiesto con que la Asociación de Guarderías y Centros de Educación Infantil de La Rioja espera ‘ganarse’ mi firma contra la puesta en marcha de guarderías públicas impulsadas por el Ayuntamiento de Logroño junto a la correspondiente oferta del Telepizza y del catálogo de una tienda de muebles, el martes recibía la ‘carta’ de la portavoz del Grupo Municipal Popular, Cuca Gamarra, proponiéndome sus cuatro medidas para solucionar los atascos de Cascajos junto al folleto de un centro de estética y la promoción de una entidad financiera…

Los ejemplos de lunes y martes no dejan de ser más que la punta del iceberg… pues que recuerde, recientemente, he depositado en el contenedor azul el ‘populares’ del PP de La Rioja correspondiente al mes de mayo, el ‘convecinos’ del PP de Logroño, la publicación relativa a las obras (y gracias) del Grupo Municipal Socialista, amén de la hoja del PR…

Lejos de decaer en la dudosa táctica para ganar adeptos, la práctica del buzoneo de propaganda política apta solo para convencidos va aumentando según se va ampliando la capacidad de nuestros buzones…

Es más, tengo la certeza de que esto no ha hecho más que empezar. No en vano, y como inquilino en primera línea de soterramiento, aún espero el día en que, con la bolsa de Carrefour en una mano, la otra se tope con la campaña (una más) en la que Cuca Gamarra y los suyos denuncian que el alcalde de Logroño planea una integración ‘a cielo abierto’ que lleva al ciudadano a plantearse si no sería más necesario ‘cubrir’ la ranura de los buzones.