Tras días de obligaciones y devociones varias, ‘Nanay de Logroño’ retoma el pulso y lo hace echando mano de una imagen que lleva unas semanas en el disco duro del ordenador que hace posibles estas ‘crónicas majas de ciudad’.
El derribo del conocido edificio de Los Gabrieles (ubicado al inicio de Bretón de los Herreros) ha sacado a la luz uno de los tesoros que permanecían ‘ocultos’ en una de las cornisas del Mercado de San Blas.
Oculto porque desde la calle del Peso, sencillamente, no hay giro de cabeza (humano y posible) que permita la perspectiva visual que los martillos neumáticos y los cazos de las excavadoras hacen ahora posible… desde la propia Bretón de los Herreros, eso sí…
Las circunstancias, caprichosas como siempre, han querido que hoy que nos hacemos eco de las voces vecinales que, recurriendo al si yo fuera…, abogan por destinar la manzana a plaza pública en lugar de a vivienda privada, el arquitecto riojano Fermín Álamo (autor del archiconocido edificio del mercado logroñés) vuelva a estar en boca de todos…