No se si Europa empieza en los Pirineos o en el País Vasco, pero lo cierto es que la última escapada (esa misma que ha mantenido en stand-by estas crónicas ‘majas’ de ciudad hasta hoy mismo) ha servido para darme cuenta de que la ‘civilización’ sigue estando a un paso…
San Sebastián, Biarritz, Bayona… Ciudades limpias, con zonas verdes que no echan en falta ni los mismísimos cuidados del responsable de la sección de jardinería del programa de TV ‘Bricomanía’ y kilómetros y más kilómetros de carriles bici…
Euskadi, Iparralde… Amplias zonas peatonales y ¡sorpresa!: baños públicos en perfecto estado de revista para alivio de humanos e inhumanos (que haberlos, también haylos)…
En definitiva, días de asueto que, con tiempo libre, invitan a la reflexión… y a una sola conclusión de vuelta a casa: hay espejo donde mirarse (de hecho, y en cierta manera, se hace) y en el caso de Logroño lo tenemos justo al lado.